Resumen
Educar valores es una tarea importante dentro de los centros escolares dado que son la base de la convivencia en la sociedad, las instituciones y docentes tienen un papel fundamental en este proceso ya que son formadoras de individuos, esta formación tiene aspectos a desarrollar como los valores básicos, los del contexto y los diferenciales (personales), para crear un esquema de valores de acuerdo a las características de perspectiva, época y momento (situación), que dan como recultado una congruencia entre el decir y hacer.
Introducción
Los valores han sido la base de la convivencia en la sociedad, la ausencia de ellos impide la interacción de los individuos. El ser humano es social por naturaleza, por lo tanto para vivir en sociedad debemos tener hábitos que nos permitan ser felices, por ende la misión del educador es formar personas intelectualmente capaces, y respetuosas del derecho ajeno, por consiguiente formar valores es prioridad, en nuestros días la sociedad enfrenta una crisis o transformación de valores.
En nuestras aulas de clase se vive un clima de hostilidad pues si bien es comprobado que la violencia sufrida, es decir cuando los alumnos son víctimas de la violencia, 43.6 de secundaria han sido víctimas de robo, tanto dentro como fuera de la escuela. Más de 24 % ha sufrido burlas y uno de cada cinco ha tenido lastimaduras físicas y amenazas (18% respectivamente), (INEGI, 2007) que lo influye diferentes factores, como: el tipo de valores que se fomentan dentro del aula, el profesor y la actitud que toma hacía ellos, el contexto en que se desarrollan, entre otras, he aquí la importancia de reflexionar y analizar sobre este tema, ahora bien nos enfocaremos a un nivel de secundaria, dado que el adolescente se encuentra en búsqueda de identidad y aceptación de la sociedad, es una etapa importante y significativa para la realización de este ejercicio.
Tareas de la perspectiva y el contexto
Resulta controversial hablar de una lista de valores que se tienen que fomentar o enseñar ya que en realidad no existe una parámetro de ellos, lo cual depende de varios factores como la perspectiva que se tenga de la vida y el contexto en que se vive, vamos a analizar un poco más acerca de esto. Los valores institucionales en centros educativos se pueden definir a partir de aspectos como: libertad, capacidad de pensar la decisión a tomar ante cada situación; dignidad, respeto debido a uno mismo y a los demás por lo que son y significa la persona; verdad, adecuación de la mente a la realidad; solidaridad, saberse responsable ante el mundo que nos rodea; paz, vivir en concordancia a través del diálogo; bien común, búsqueda y acción permanente de trascender del bien personal al bien de los demás en la construcción de la paz, etc. (Gavira, s.f.).
Se le llama perspectiva, al conjunto de circunstancias que rodean al observador, y que influyen en su percepción o en su juicio. Los valores a su vez deben de adaptarse a la perspectiva, al contexto, al mundo en el que vive el individuo, no serán los mismos valores que se quieran fomentar en un adolescente mexicano libre y democrático, a un adolescente asiático y budista. Existen diversos tipos de perspectiva acerca de la clasificación de valores, entre los cuales podemos encontrar a los tradicionalistas que tiene como visión la formación de “valores absolutos” universalmente aceptados: los valores éticos, estéticos y religiosos, tales como, la verdad, el valor, la justicia, la equidad, la libertad, la belleza, la bondad o la compasión por el prójimo, (Parra, 2003). Generalmente en todos los ámbitos llámese educativos, familiares o sociales, se cree que son los ya mencionados los que rigen a la sociedad, los que deben fomentarse e inculcarse a los individuos que se encuentran en formación, y la ruptura de alguno de ellos es mal visto por la sociedad.
Por otra parte en contraste de los tradicionalistas, los modernistas adoptan la idea de deshacerse de los valores tradicionales, que son apegados a la religión, optan por “La preparación para la vida”, la cual predominan los valores racionales, se trata mas de productividad y demanda, lo cual no es suficiente para el objetivo que pretende los valores. Uno de los estudios sobre (Ángeles, 1991, 1) afirma que:
“Ante este momento en el que se encuentra orientación educativa, resulta necesario trascender con ella a manera que se adopte una nuevo definición y percepción, que corresponde en gran medida al comportamiento previsible de la sociedad y, en consecuencia, del sistema educativo donde constituye una herramienta crucial para la formación de habilidades y capacidades que aumentan la productividad de cualquier persona”.
Y no podemos dejar de mencionar a los subjetivistas, que a mi parecer es de la más acertada, ya que se enfoca en la construcción de los valores que predominaran en la vida mediante “la interacción y confrontación crítica con las fuerzas dinamizadoras del mundo y de la cultura”, (Parra, 2003). De manera que cada individuo vive situaciones diferentes, bajo circunstancias propias, y los valores no pueden enseñarse como las tablas de multiplicar que es cuestión de memorizar, repetir y aplicar, estos tienen una parte más vivencial-experimental y es aquí en donde realmente se aplicarán y se verá si han sido adquiridos o no. Para enfocarnos en el meollo de este análisis debemos considerar que existen diversas etapas de adquisición de valores, a edad temprana, media y grande.[1]
Los valores se encuentran reflejados en lo que uno dice y hace, ya lo decía Juárez “Malditos aquellos que con sus palabras defienden al pueblo y con sus hechos lo traicionan” por consiguiente un pensamiento crítico requiere no solo del saberlo hacer y pensar, también se encuentra reflejado en la conducta que se muestre al actuar, debe de haber una coherencia entre ambos para que puedan mostrarse y dejarse ver los valores implicados, como lo menciona Parra (2003) en su definición de los subjetivistas es verdad que cada individuo tenga que realizar y contribuir a su propio esquema de valores, y existen factores que contribuyen a esto.
Valores en el aula
El esquema de valores tendrá que ser un conjugando por tres tipos de valores: los valores básicos (universales), los valores practicados en el contexto sociocultural y los valores diferenciales, es decir lo que cada quien adopta a lo largo de su existencia.
Si una persona logra hacer su propio esquema con la conjugación de estos tres tipos de valores, se podría decir que se esta tratando de un “buen pensador crítico” ¿por qué lo aseguramos de esta manera?, por que en efecto quien puede poner en práctica dichos valores será poseedor de las actitudes mentales del pensador crítico que Espíndola (1996) enuncia como: humildad, valentía, empatía, integridad, perseverancia, confianza y sentido de justicia. Es por eso que para poder lograr el desarrollo e integración de este esquema es importante establecer las condiciones en las que serán desarrollados dichos valores.
Mi salón es mi refugio
El aula de clases juega un papel importante, es indispensable que se encuentre en estabilidad emocional, que los participantes o actores escolares sean los que ayuden a este desarrollo y no por el contrario lo obstaculicen. Por consiguiente el docente como regulador del aula debe de implicarse profundamente, crear el clima de confianza, para que los alumnos puedan sentir hasta cierta libertad y no finjan un comportamiento que en realidad no tienen desarrollado, este mismo docente tendrá la habilidad de adaptar las situaciones a las características de cada uno de los alumnos, para que vaya acorde con su propio esquema, y mantener una actitud de “sombrero blanco” al actuar [2].
En consecuencia, en los alumnos debe existir un clima de estimación y respeto por parte de todos, ya que de esta forma se facilitará la interpersonalidad entre ellos y la sana convivencia que es lo que se busca tendrá su lugar en el salón.
El ejemplo a seguir
El alumno tiene una visión de lo que es su profesor, éste a su vez se espera que sea una persona integra y congruente, tal vez se pueda creer que se le otorga mucho peso a la figura del profesor, pero en realidad pasa a formar parte de la vida de los alumnos. Para que este actor escolar tenga relevancia en este proceso deberá de ser cuidadoso con los valores que desea desarrollar y fomentar en el adolescente, ya que así como los menciona y recomienda debe utilizarlos, por ejemplo: es como un comerciante de ropa que usa la marca que vende, la actitud que toma al utilizarla es de recomendación de su prenda.
Pero esto no es suficiente, también deberá planear la forma de abordarlos, utilizando métodos y técnicas que aseguren el desarrollo optimo de ellos, esta tarea no es fácil por ello el profesor debe estar conciente de la labor que se quiere hacer y no tomar una postura apática hacia esta práctica, así como dejar de escudarse en otras actividades a realizar como el avance programático, la documentación, entre otras que podrían tomarse como pretexto para no ejercer esta actividad formativa, este punto podemos concluir con estas palabras. Ventura, (s.f. 191) afirma que:
La educación juega un papel determinante frente a situaciones adversas, pues es el docente con su intervención pertinente y oportuna quien debe trabajar para lograr que los alumnos construyan un mundo más justo y transformen la vida en algo más positivo.
Después de todo lo abordado, podemos concluir que el educador con su intervención puede desarrollar y fomentar valores en los adolescentes, no sería una labor sencilla, necesitaría de un gran compromiso pues si bien, se lleva a cabo este proceso se tendrá resultados positivos, pero si por el contrario el docente no asume su responsabilidad ante este grito de ayuda de la sociedad las consecuencias pueden ser lamentables, un adolescente drogadicto, ratero, asesino o simplemente irrespetuoso como ciudadano no es lo que deseamos ver en este país.
Mi vida, mi mundo…
Ahora bien, dentro del ámbito escolar existen textos como los libros de Formación Cívica y Ética que es la asignatura en donde trata de darse énfasis a los valores, son editados desde el programa escolar que se utiliza en la actualidad, es decir para este 2011 se utilizan libros de la reforma escolar 2006, una diferencia de 5 años en hechos, así también se utilizan ejemplos de manera general y global a nivel país, con este dato no estoy diciendo que los libros no nos sirvan para fomentar los valores, pero evidencia una más de las tareas del profesor, al adaptar ciertos contenidos a la actualidad y al momento que se vive.
De manera que ejemplificar con hechos recientes, reales y dentro del contexto de los adolescentes, para que les sea de más interés y se involucren con la problemática, en el mismo salón de clases existen conflictos con los compañeros de clase, estos pueden ser aprovechados para retomar alguno de los valores que se pretenda fomentar en ellos, haciéndoles reflexionar en el momento, no hay por que esperar al horario en que se marca la clase de formación, ya que se debilita el impacto que pueda causar en ellos, en otras palabras como lo menciona Palos, (2000, 249):
Juzgo que la formación en valores como tema transversal en secundaria es necesaria en tanto que permite a nuestros jóvenes identificar, interpretar y criticar situaciones de injusticia en la realidad y en las normas sociales para construir de forma autónoma, racional y dialogante los valores que favorecen la convivencia desde una perspectiva crítica. Esto se puede lograr con la mediación del profesor y el empleo del método constructivista.
De manera que cada individuo tiene su lugar y momento, la época en que vive definirá muchas de las circunstancias en las que se desenvolverá, para resolver un conflicto no podemos recurrir a los hechos de un pasado ya que la sociedad se encuentra en constante transformación y tiene sus propias particularidades, por ejemplo, en épocas pasadas se le cortaba las manos al que robaba, hoy en día sería un crimen el ejercicio de esta actividad, la ley protege a absolutamente todos y constantemente existen reformas que modifican los derechos y obligaciones, es por esto que cada situación tiene que ser abordada en tiempo y forma, de modo que en las instituciones los contenidos deben de adaptarse al momento y las circunstancias abordarse según el contexto.
Conclusión
Para que los valores puedan ser fomentados, desarrollados, y aplicados desde una etapa adolescente es importante tener el propósito en la mente, la formación de individuos que ejerza la convivencia sana interpersonal, practicarla en todo momento y lugar, teniendo en claro que no solo es tarea del hogar, de manera que la escuela y el docente tienen un papel importante en este proceso, en definitiva hablar de valores es hablar de la transformación de una sociedad, en consecuencia es tarea de todos llevar a cabo este proceso y se invita a que cada docente encontrándose en su centro de trabajo adquiera el compromiso por realizar lo posible y cumplir con esta formación.
Referencias
Ángeles Gutiérrez, O. (1991). Una alternativa para la Orientación Educativa del Futuro . Revista De La Educación Superior Vol.XX (1), Número 77, Enero Marzo. Recuperado el 12 de Mayo del 2011. http://www.anuies.mx/servicios/p_anuies/publicaciones/revsup/res077/txt4.htm .
Bautista, R. (2005). La Educación en Valores y sus objetivos en Educación Secundaria. Recuperado el 11 de abril de 2011 de http://www.csi-csif.es/andalucia/modules/mod_sevilla/archivos/revistaense/n18/valores_sec.pdf
Espíndola, J. L., (1997) “Pensamiento Crítico”. En: Reingeniería Educativa. México: Colección Biblioteca de la Educación Superior. pp. 105-106
Gavira, A. (s,f). Valores y educación. Recuperado el 22 de mayo de 2011 de http://www.tlalpan.uvmnet.edu/oiid/download/Valores%20y%20educación_04_ING_IME_PIT_D.pdf
INEE, (2007). Violencia en las escuelas, Enredados por una mejor educación. Recuperado el 15 de mayo de 2011 de http://www.escuelasenred.com.mx/index.php?option=com_content&view=article&id=182:violencia-en-las-escuelas&catid=59:situaciones-socioafectiva&Itemid=65
Levinson, B. (2002). Valores y cultura estudiantil en la secundaria mexicana. Ornelas, C. Valores, Calidad y Educación. (173-204) Recuperado de http://profile.educ.indiana.edu/Portals/123/Articles/Valores y Cultura Estudiantil en la Secundaria Mexicana.pdf
Palos, J. (coord.) (2000). “Ejes o temas transversales del currículum: educar para un desarrollo humano y un futuro más justo y sostenible”, en Luna, Ma. E. (comp.). Derechos Humanos y Educación Valoral. Selección de lecturas, SEV/UPV/MEB, 2006, pp. 249-258.
Parra, J. (2003). La educación en valores y su práctica en el aula. Tendencias pedagógicas 8 (4), 69-88. Recuperado de http://www.uam.es/departamentos/stamaria/didteo/Paginas/ Documentos/Revista/n_8_tendencias/8_4.pdf
Ventura, D. (s.f.). Formar adolescentes con valores y respeto por los derechos humanos. Recuperado el 15 de mayo de 2011 de http://meb.sev.gob.mx/difusion/anto2/16.pdf
[1] Cada etapa tiene sus particularidades, por ejemplo: en edad temprana, los padres de familia y sociedad son participe de ella, a edad media entran en la participación mas actores, entre los que destacan los docentes que atienden a los jóvenes así como las amistades.
[2] Características de sombrero blanco: Objetivo, neutral, no interpretativo, disciplinado,
direccional, pensamiento claro y sencillo.
direccional, pensamiento claro y sencillo.